El sistema de inscripción On line implementado por el Gobierno de la Ciudad no garantiza las vacantes para las familias que eligen las escuelas públicas porteñas. La UTE había acompañado a un grupo de familias en una presentación judicial el pasado 24 de octubre solicitando que quienes eligieran inscribirse presencialmente pudieran hacerlo. Lejos de oponernos a la facilitación de los trámites de inscripción y a uso de las tecnologías, queríamos garantizar el vínculo pedagógico que implica la primera elección de una escuela y las vacantes para cada uno de los estudiantes. Sin embargo, el Gobierno de Macri siguió adelante y con un sistema que no contó ni siquiera con la capacitación y la información adecuadas para las comunidades educativas.
Durante todo el día de ayer, 9 de diciembre, las madres y los padres se fueron encontrando con la denegación de las vacantes solicitadas por un sistema que no respeto ni siquiera la variable más sencilla de la proximidad a la escuela. Alumnos anotados en el colegio de al lado de su casa enviados a instituciones distantes a más de 20 cuadras, hermanos que quedaron inscriptos en distintas escuelas, niños y niñas que quedaron lista de espera en las siete opciones que pidieron, casos de jardines de infantes que comparten edificio con la escuela primaria y no obtuvieron vacantes en primer grado. Estos son algunas de las historias que se repiten en las puertas de las escuelas.
Este empecinamiento del macrismo o es un capricho o una política deliberada para atacar la matrícula de la escuela pública y justificar sus intentos de cierres de grado, esperemos que sólo sea un capricho y resuelvan inmediatamente los reclamos para que todo aquel que elija la educación estatal tenga su lugar. Además, con relación a los datos recolectados de falta de vacantes o irregularidades en la asignación la UTE volverá a la Defensoría General de la Ciudad para continuar la vía jurídica.