EL KIRCHNERISMO REALIZÓ UN «CONTRACOLOQUIO» EN RESPUESTA A IDEA, PARA «DEFENDER LOS PILARES DEL PROYECTO»

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23.10.2014. Dirigentes kirchneristas realizaron hoy un «contracoloquio» paralelo al 50º Coloquio de IDEA, que reúne cada año a los principales hombres de negocios y líderes políticos del país, con el fin de «contraponer posturas» y «defender los pilares del proyecto» del Gobierno, al tiempo que declararon su apoyo a la ley de Abastecimiento y acusaron a los grandes empresarios de «pedir el ajuste». «Cuando se trata de elegir entre volver a un pasado de exclusión de las mayorías y entrega del país o defender los pilares de un proyecto que apunte a la construcción de una patria desarrollada, inclusiva y soberana, no tenemos mucho que pensar», indicó el documento final de la jornada, realizada en el teatro Melany de la ciudad balnearia, a 5,6 kilómetros del hotel Sheraton, donde se realizada la segunda jornada del Coloquio de IDEA, que finaliza este viernes. «En nuestra memoria están la desocupación masiva, las familias en situación de calle, los saqueos, el trueque como medio de cambio, los proyectos en crisis, mientras unos pocos se beneficiaban», agregó el pronunciamiento. Del «contracoloquio» participaron, entre otros, el ministro de Trabajo, Carlos Tomada; los diputados nacionales Héctor Recalde y Juan Carlos Junio, y los sindicalistas Horacio Ghilini (CGT de Antonio Caló) y Eduardo López (CTA de Hugo Yasky), además de un grupo de Madres de Plaza de Mayo. Estaba prevista la participación del presidente del Banco Central, Alejandro Vanoli, y del viceministro de Economía, Emmanuel Álvarez Agis, pero ambos no pudieron desatender sus funciones en Buenos Aires, señaló a NA el diputado Recalde, quien dijo que el gobernador Daniel Scioli, que inauguró el Coloquio de IDEA, «también tenía la intención de venir». Antes de la lectura del documento, el ministro Tomada formuló duros cuestionamientos a los organizadores del Coloquio de IDEA por haber invitado al economista peruano Hernando de Soto, a quien acusó de «pretender legalizar la informalidad laboral». «Cuando en el otro boliche (el Sheraton de Mar del Plata, donde se realiza el Coloquio de IDEA) piden ajustar, nosotros metemos doce mil millones de mangos para la moratoria jubilatoria», dijo Tomada. Recalde, el último orador del «contracoloquio», sostuvo que «la ley de abastecimiento es la ley de la igualdad» y que los empresarios la cuestionan porque «quieren abusar de su posición dominante». «Estos muchachos que están allá en el Sheraton hotel, frente a la alegría nuestra son caricúlicos. No pelean por convicciones, sino por intereses», dijo Recalde, diputado del Frente para la Victoria y padre del gerente de Aerolíneas Argentinas, Mariano Recalde. El documento del «contracoloquio», organizado por la Convocatoria Económica y Social por la Argentina, un grupo de dirigentes kirchneristas conformado a fines del año pasado, señaló que «las dificultades coyunturales y los ataques especulativos contra la Argentina se ven agravados y exacerbados por la continua ofensiva de grandes grupos económicos altamente concentrados y extranjerizados, que buscan maximizar su rentabilidad a costa del sacrificio de todos los argentinos». Al respecto, y en alusión a los participantes del coloquio de IDEA, afirmó que «estos sectores de grandes empresas, lejos de actuar en un mercado libre como el que dicen promover, conforman monopolios y oligopolios que se desempeñan de modo cartelizado y abusan de su posición dominante, fijando precios y condiciones al conjunto de la economía». En este sentido, la Convocatoria oficialista defendió las leyes de Abastecimiento, de creación del Observatorio de Precios y Disponibilidad de Insumos y de creación del sistema de resolución de conflictos en las relaciones de consumo. «La aplicación de la ley de Abastecimiento es indispensable para que los monopolios y oligopolios no sean los que definan el futuro del país. El accionar de estos actores del poder económico no sólo afecta a los consumidores, sino que condiciona gravemente la rentabilidad e las micro, pequeñas y medianas empresas, al imponerles precios y condiciones abusivas de comercialización», indicó el pronunciamiento. Los dirigentes criticaron que los grandes empresarios «argumentan que la normativa afecta el derecho de propiedad de las empresas sobre su patrimonio y sus ganancias», pero que «en verdad el denominador común de estas posturas es el rechazo hacia cualquier tipo de regulación por parte del Estado». «Para justificar esta posición e impedir su aplicación, interpretan de modo parcial y tendencioso la Constitución Nacional, que otorga el derecho de ejercer toda industria lícita, pero también impone límites precisos en la protección de los derechos de los trabajadores y de toda la ciudadanía», señalaron. Y, al respecto, remarcaron que «los legítimos derechos de propiedad no conllevan el ejercicio irrestricto de la deslealtad comercial, la especulación financiera, el incremento infundado de precios, el desabastecimiento y el abuso de posición dominante». Finalmente, advirtieron que la resistencia a estas leyes «probablemente incluirá medidas cautelares que hagan peligrar su inmediata aplicación», pero anticiparon que, en este caso, recurrirán a la Justicia «en calidad de terceros interesados» para plantear «la afectación y el daño que semejante atropello a la ley ocasiona».