El discurso educativo de Larreta tiene patas cortas

 

El discurso educativo de Larreta tiene patas cortas
La algarabía impostada de Horacio Rodríguez Larreta en el inicio de sesiones ordinarias de la Legislatura porteña al mencionar la supuesta construcción de nuevas escuelas no pudo ocultar que este lunes más de 24 mil familias que eligieron la escuela pública se quedaron afuera por la falta de inversión educativa.
La postal de interminables colas de madres y padres en las sedes distritales fue la misma de cada marzo. La ciudad más rica del país vuelve a mostrar que es también la más injusta, la que menos esfuerzo hace en materia educativa. La porción del área dentro de la torta presupuestaria general sigue bajando. El Jefe de Gobierno habla de nuevas vacantes que sólo se ven en los carteles publicitarios, porque en los barrios, las listas de espera por un lugar en escuelas públicas, siguen creciendo, sobre todo en el nivel inicial.
Hoy en el barrio de Balvanera, en la puerta de la Escuela Infantil 6 DE 6, “el jardín del Ramos”, la Comunidad Educativa denunció la pérdida de 350 vacantes en una zona donde el acceso a la educación de la primera infancia es insuficiente.
El Jefe de Gobierno porteño continúa enumerando escuelas construidas durante su gestión a modo de récord histórico, a pesar de haber sido desmentido por las comprobaciones realizadas por la Justicia.
Otro de los puntos en los que centró su discurso fue la Secundaria del Futuro, un despliegue publicitario que, detrás de los coloridos flyers, encubre una reforma inconsulta que modifica las condiciones de trabajo de lxs docentes y obliga a lxs alumnxs a realizar pasantías desde la lógica del emprendedurismo.
Para finalizar su discurso en materia educativa, Larreta se refirió a la UNICABA, cuyo triste mérito es haber sido creada detrás de las vallas policiales y haber logrado el rechazo de las comunidades de los profesorados y las universidades públicas y privadas. Desconoció las trayectorias de la formación que se desarrollan en la Ciudad, desoyó a especialistas y habla maravillas de una universidad sin consenso.
Pensar en la Educación Pública superior implica más presupuesto, mejores condiciones de trabajo, investigación y formación. Lamentablemente en todos los años de su gobierno, la desinversión es una constante.
En las aulas y en las calles, lxs docentes instamos al Gobierno de la Ciudad a que realice una reflexión profunda y se comprometa a invertir en educación y acompañar las trayectorias de todxs nuestrxs estudiantes.