La Unión de Trabajadores de la Educación junto a ATE y AGTSyP desarrolló este miércoles una clase pública frente a la sede del Gobierno porteño para exigir la actualización de las asignaciones familiares, que se encuentran congeladas en 270 pesos desde el año 2012.
La actividad contó con la presencia de la secretaria General de UTE Angélica Graciano, el secretario General de ATE Capital Daniel Catalano y el secretario General de AGTSyP Beto Pianelli.
Esta semana, el oficialismo porteño avanzó en la Legislatura con un proyecto para actualizar las asignaciones familiares de los empleados públicos que perjudicará a los trabajadores de la educación con mayor carga horaria.
Graciano explicó que en la Ciudad las trabajadoras y los trabajadores de la educación tienen en su mayoría más de un cargo, por lo que, una vez más sentirán un perjuicio en sus ingresos, y recordó que las asignaciones las cobran en su mayoría las mujeres trabajadoras, que son en muchos de los casos sostén de hogar.
La clase pública se realizó sobre la calle Uspallata al 3100 y se transmitió por streaming a través de las redes sociales.