Siguen los daños colaterales

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18.03.2014. Al menos 300 familias siguen tratando de conseguir un lugar o reubicar a sus hijos, en el nivel primario. Grados con 35 chicos o más y asignaciones de vacantes en distritos que no corresponden al domicilio son algunos de los problemas a resolver.

A dos semanas del inicio de las clases, las fallas de la inscripción escolar online siguen generando inconvenientes en la cotidianidad de distintas escuelas de la Ciudad. En al menos dos distritos escolares (DE) populosos, como lo son el 11, que acoge las escuelas de Flores, y el 13, que abarca Mataderos, Parque Avellaneda y Lugano, entre 250 y 300 familias continuaron pidiendo o rectificando vacantes a lo largo de toda la semana pasada, y al menos 50 lo hicieron ayer, lunes. Fuentes escolares explicaron que, al concurrir a los distritos, las familias son recibidas por los supervisores, a quienes ahora, con el ciclo lectivo comenzado, el Ministerio de Educación “ordenó resolver” los problemas de la inscripción. “Las familias van al ministerio y de ahí los mandan directamente a los distritos, para que resuelvan los supervisores. Y los supervisores piden reuniones con autoridades del ministerio, pero no les dan respuesta, sólo los mandan a resolver” los problemas de vacantes pendientes, señaló una de las fuentes.

La semana pasada, alrededor de 50 familias por día se presentaron en los distritos escolares mencionados para tramitar rectificación o pedido, otra vez, de vacante. En algunos distritos, el número fue mayor. “A los problemas de la inscripción online del PRO los están resolviendo los supervisores, que son gente de carrera y a los que hasta ahora no les dejaban ni ver los listados”, contó Carolina Brandaris, docente del Distrito Escolar Nº 13 y delegada de UTE. Los inconvenientes que la inscripción online sembró a su paso persisten y generan situaciones de resolución compleja. En la Escuela 15 del DE 15, ubicada en el Barrio Samoré, “había inscriptos 175 chicos en primer grado, entre los dos cursos de la mañana y los dos de la tarde”, ejemplificó Brandaris. “Hubo que unificar los séptimos grados en aulas con menos capacidad para generar otro primer grado y así distribuir mejor, que fue una tarea a cargo de los supervisores y los directivos y propuesta por los docentes”.

En otra escuela del mismo DE, la 11, la cantidad de alumnos inscriptos excede largamente la que, de acuerdo con el reglamento escolar, pueden albergar las aulas disponibles. “En la 11 hay dos cursos de primer grado con más de 35 chicos en aulas en las que caben menos de 20 chicos. Pasó porque en la inscripción online crearon dos cursos donde hay lugar para uno. Hubo mucho conflicto por eso, porque no se pueden dictar clases así. Finalmente, en una asamblea de familias, docentes, directivos y supervisores se resolvió reubicando a los quintos grados, que pasan a las aulas de primero, pero dejan a los más chicos en el primer piso”, con los riesgos que pueden implicar las escaleras. En esa escuela, para evitar el hacinamiento de los chicos, un grupo de docentes y familias había propuesto conseguir un micro escolar para que parte de los inscriptos viajaran hacia otra escuela, en otro distrito, donde sí había vacantes. “Era una medida parche, pero el Gobierno de la Ciudad bloqueó esa posibilidad aduciendo falta de presupuesto”, dijo la docente.

“Pero aunque en el distrito se vayan resolviendo las vacantes, hay otros problemas de la inscripción y es que los chicos están amontonados. En los comedores escolares hay demasiados chicos para la capacidad que tienen las escuelas, y además el conflicto se desgrana por cansancio, porque ante estos problemas que continúan, la familia que tiene posibilidades manda a su hijo a escuela privada”.

En el DE 11, que comprende la veintena de escuelas de Flores, la semana pasada eran 300 los casos de familias con problemas de vacantes en primer grado por la inscripción online y otros 100 los que fueron asignados en jurisdicciones erróneas, informó Natalia Militi, docente del distrito y también delegada de UTE. Ayer unas 40 personas se habían acercado al DE porque sus hijos continúan sin vacantes, “y algunos vuelven para ver si se desocupa alguna, porque al haber tantos casos de asignaciones erróneas no se termina de definir qué cantidad hay. Hay gente de Villa Urquiza a la que le asignaron vacante en Flores, por ejemplo, y hasta que no vengan al distrito y den de baja esa vacante, no se puede disponer. Hay inclusive hermanos que han quedado en esas situaciones, en las que uno fue asignado a Flores y otro a Paternal o Chacarita”, explicó la docente.

En las escuelas del distrito, llega a haber primeros grados con 39 inscriptos, pero algunas vacantes asignadas están por confirmarse, porque “en nuestra zona hay muchos niños de la colectividad boliviana y peruana, que muchas veces están fuera del país para visitar a sus familias y recién empiezan a volver” en estos días.

La docente Militi explicó que supervisores y directores “están ajustando números para que todos los chicos puedan entrar, pero de todos modos esto va a perjudicar la forma de dar clases y en el aspecto pedagógico es más complejo. Uno quiere garantizar la escolaridad, pero para un maestro de primer grado tener más de 30 chicos es complejo”.