Desde la UTE repudiamos la persecución del Gobierno de la Ciudad a estudiantes y familias, con el objetivo de intimidar a lxs jóvenes que están ejerciendo su derecho a la protesta frente a la falta absoluta de escucha de la Ministra Soledad Acuña a sus reclamos.
La Ministra de «Educación» cancela el diálogo y los únicos canales que utiliza son los de los medios de comunicación. Ante los reclamos de mejoras en la cantidad y calidad de las viandas, infraestructura y mobiliario escolar, el trabajo estudiantil en condiciones precarias, hace oídos sordos y amenaza con sanciones a estudiantes y denuncias penales a lxs adultxs.
La utilización de efectivos de la Policía de la Ciudad para identificar, hostigar e intimidar a lxs estudiantes y sus familias nos retrotraen a épocas contrarias a los valores democráticos que construimos en las escuelas.
En una escalada de violencia hacia la comunidad educativa, la denuncia de Acuña a madres y padres, y la persecución policial niega y anula la voz de lxs chicxs como sujetxs de derecho, enmarcada en la Ley de Protección de Derechos de NNyA.
Exigimos al Ministerio a dar marcha atrás con estas medidas persecutorias y genere canales reales de diálogo con lxs estudiantes organizadxs.