Aunque se llena la boca con las bondades del diálogo y el respeto a la justicia independiente, la gestión del PRO, al pagar el sueldo del mes de Abril, incumplió el fallo del juez Trionfetti, del Tribunal en lo Contencioso Administrativo de la Ciudad. Esta resolución judicial obligaba al Gobierno a no descontar en su totalidad el Adicional Salarial (presentismo), sino en forma proporcional a los días de Paro. El Gobierno de Rodríguez Larreta lo desconoce en otro ataque a los docentes efectuando descuentos salariales que tienen el único fin de castigar la lucha en defensa de la educación pública. Esto se suma a la provocación del Comunicado 81 del Gobierno porteño. (Ver nota aparte)
Desde la Unión de los Trabajadores de la Educación exigimos el cumplimiento de los fallos judiciales y el inmediato reintegro de lo descontado a la vez que continuamos reclamando el respeto del derecho constitucional a huelga permanentemente avasallado por el macrismo. También continuamos sosteniendo que los descuentos por días de paro en la ciudad de Buenos Aires son ilegales en tanto se originan en un incumplimiento patronal, tanto en el plano nacional donde el ministro Esteban Bullrich omite la Ley y se niega a convocar a la Paritaria Nacional Docente, como en el jurisdiccional, donde el Gobierno porteño incumplió la cláusula de monitoreo salarial establecida en el acta paritaria de 2016.
El secretario General de UTE, Eduardo López, afirmó que: “es inadmisible que en nombre del diálogo sólo tengan agresiones y violencia contra los docentes, pero no van a lograr amedrentarnos porque la perseverancia y el compromiso con el derecho a la educación es constitutivo de nuestra tarea como maestros”. Y agregó, “las medidas de fuerza que realizamos en defensa de nuestros salarios y de la Ley de Financiamiento Educativo, además de ser constitucionales se originaron en incumplimientos por parte de la patronal tanto a nivel Nacional como jurisdiccional en ralación a leyes vigentes y compromisos paritarios asumidos”.
Al mismo tiempo, la UTE, junto al conjunto de los sindicatos docentes porteños, reclama la reapertura de la discusión salarial ya que, pese a ser una de las jurisdicciones más ricas del país, la Ciudad de Buenos Aires, ofrece a los docentes una de las recomposiciones salariales más reducidas. Mientras provincias como San Luis, Formosa, Neuquén, Santa Fe o Córdoba realizaron aumentos que oscilan entre el 24,5 y el 40 por ciento, el gobierno porteño se limitó a una propuesta de 19 por ciento en línea con la orden del ejecutivo nacional. Del mismo modo, la Provincia de Buenos Aires junto a Corrientes, Jujuy y Mendoza gobernadas por la Alianza Cambiemos se mantuvieron en porcentajes similares. Si bien hay excepciones, donde no gobierna el oficialismo nacional y los ofrecimientos fueron menores, como el caso de Santa Cruz, Chubut y Salta, la lectura completa del mapa paritario demuestra claramente la decisión del gobierno Nacional de reducir el poder adquisitivo de los trabajadores. Lo confesó sin eufemismos el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, hace unos días, cuando expresó en Washington “las paritarias en el Estado no le pueden ganar más a la inflación”.
A esto hay que agregar que, al mismo tiempo, el Macri presidente eligió al gremio docente como ejemplo de disciplinamiento. Si triunfa en ese intento tiene el camino allanado para arrodillar al resto de los trabajadores. Cuando Macri era candidato a presidente y Jefe de Gobierno de la Ciudad, actuaba como Mauricio y respetaba los acuerdos de la Paritaria Nacional Docente. Hoy, como presidente actúa muy distinto y se convierte en el garante de la rebaja del salario real con dos mecanismos complementarios. En el sector privado, utiliza el aumento del desempleo y los despidos para congelar salarios. Y en el ámbito estatal, anula la Paritaria Nacional aunque ello implique incumplir las leyes y los compromisos electorales.