El Argentino / 20.10.2015. La Unión de Trabajadores de la Educación (UTE-Ctera) presentó ayer un recurso de amparo para exigir al Gobierno de la Ciudad una “solución inmediata y concreta” al reclamo que realizan desde hace varios años por las deficiencias edilicias de la escuela “Carlos Mugica”, ubicada en el barrio porteño de Retiro, a la que asisten niños, niñas y adolescentes de la Villa 31.
En concreto, reclaman a la administración macrista que solucione “de manera urgente” los problemas eléctricos y de pérdidas de agua que generan inundaciones y riesgo para los alumnos y docentes
“La paradoja es que aquí a diez cuadras hay escuelas de la ciudad que están en muy buenas condiciones, con aire acondicionado, con baños como corresponden y pisos que no se inundan; sin embargo parece que la ‘Mugica’ como está al lado de la Villa 31 no merece esas condiciones”, dijo a Télam Marcelo Parra, secretario del nivel medio de UTE.
“Este edificio hace 25 años fue pensado como un obrador y luego se reutilizó como escuela pero el estado es pésimo”, explicó Parra, y describió que en la institución “los pisos de cemento se levantan, se tapan las cañerías, los techos son de chapa, cuando llueve se inunda y se corta la luz, hay goteras, los baños no funcionan correctamente, y hay ventiladores y estufas que no están instaladas de manera adecuada”.
La organización gremial y la comunidad educativa protestaron con una radio abierta en la esquina de Letonia y Antártida Argentina, donde reclamaron “condiciones dignas para enseñar y aprender”.
Walter Larrea, educador y delegado gremial, remarcó que los estudiantes de la “Mugica tienen los mismos derechos que todos los demás alumnos de cualquier otra escuela de la ciudad”.
Larrea también contó que “la directora ha realizado un montón de notas” advirtiendo al gobierno porteño sobre las precarias condiciones edilicias pero hasta el momento no han “tenido respuestas satisfactorias”, ya que las soluciones que se les brinda son “parches insuficientes”.