El gobierno porteño no para con el ajuste en la educación de la Ciudad. El viernes 23 de febrero el Ministerio de Educación de la Ciudad anunció el cierre de doce sedes donde se cursaba el Plan FinEs, una modalidad que permite terminar la escuela secundaria a adultos que tuvieron que abandonarla.
Esta arbitraria medida no solo afecta a casi 500 estudiantes de la Ciudad, que no podrán continuar sus estudios, sino también deja sin su fuente laboral a más de 80 profesores que están capacitados con las competencias pedagógicas para trabajar en estos contextos.
La UTE le exige al gobierno porteño que cese con el vaciamiento de la educación pública. Esta medida es una vulneración al derecho social a la educación de trabajadores, madres y padres de familia y sectores de alta vulnerabilidad que aspiran a un título secundario para mejorar sus condiciones de trabajo.
Es increíble que en la ciudad más rica del país la desocupación llega al 17% y la respuesta de Larreta es vaciar este programa que entre otros objetivos tiene el fin de asegurar que personas que tuvieron que abandonar sus estudios para ir a trabajar, ahora no sólo estén sin trabajo sino además se quedan sin educación.
Basta de ajuste y recortes en la educación pública de la Ciudad.