17.04.2013. Un trabajador falleció mientras realizaba reparaciones en el techo de la Escuela Nº 17 «Francisco de Victoria» , informaron los gremios Ademys y UTE-Ctera, quienes denunciaron la falta de mantenimiento de infraestructura escolar de la Ciudad.
Por el trágico accidente, en el que murió el operario Gerardo Rodríguez, se suspendieron las clases. El hecho fue presenciado por los alumnos de sexto grado, ya que realizaban las clases de gimnasia al momento en que el trabajador cayó.
En un comunicado, los docentes de la escuela Nº 17 exigieron «una solución urgente e inmediata para asegurar la integridad física y emocional de los que día a día asistimos a este establecimiento educativo realizando responsablemente nuestra labor».
A raíz del hecho, funcionarios del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires mantuvieron hoy una reunión con padres y docentes de la escuela, junto con representantes de entidades gremiales.
«Vinieron a dar la cara los funcionarios porque ocurrió una muerte, si no no hubiesen venido», manifestó Rosario, madre de dos niñas que concurren al establecimiento.
«Nosotros hemos tenido muchos problemas edilicios, desde la caída de techos hasta incendios, y desde la Cooperadora, junto con los docentes, hemos presentado durante tres años notas dirigidas a Infraestructura, pero creo que terminan en el tacho de basura porque nunca hemos tenido respuesta», dijo la madre.
Otra mamá de dos niñas que concurren al primer grado, Florencia, recordó además que «el año pasado un electricista también tuvo un accidente porque se cortó con una moledora, y es que vienen a trabajar sin medidas de seguridad y en el horario escolar».
Rosario informó que, luego de la muerte del operario y tras la reunión con los funcionarios, «se decidió que durante jueves y viernes se harán jornadas de reflexión con papás y docentes, y además vendrán funcionarios de Infraestructura para mirar las condiciones en el que está el colegio», aunque dijo «descreer» de la palabra de las autoridades por la falta de respuesta anterior.
Dirigentes gremiales asistieron a la reunión que mantuvieron docentes y padres con el subsecretario de Gestión Económica, Carlos Javier Regazzoni, y con el Director General de Escuelas, Max Gulmanelli.
«En esta escuela centenaria se ve el abandono del Estado, porque vemos cómo se caen los techos, se filtra agua por las cañerías de luz, hay paredes con electricidad», denunció a Télam Miriam Camarano, de Sedeba.
La escuela también tiene clausurado, desde hace un año y medio, la biblioteca y el gimnasio por problemas de infraestructura, y por esto último, la Asociación de Docentes de Educación Física (ADEF), había presentado una denuncia al gobierno porteño.
«Hoy vine a ver si había novedades luego de la presentación y me encontré con esto», manifestó Andrea Beiró, de ADEF, quien trabajó durante veinte años en la institución.
«En reiteradas oportunidades hemos concurrido a la Legislatura porteña con firmas de padres por diversos reclamos relacionados con la infraestructura que no se han tomado en cuenta, o sólo se han hecho medidas de emergencia», manifestó Ana Ríos, secretaria gremial de UTE-CTERA.
«Uno de los problemas que tenemos es que el Gobierno porteño subejecuta el presupuesto educativo para los arreglos y terceriza en distintas empresas, por lo cual cada una de las empresas le pasa la pelota a la otra en relación a los trabajos que se hacen», denunció Ríos en diálogo con Télam.
Manuel Gutiérrez, de Ademys, completó: «Este hecho grave que sucedió ayer manifiesta la continuidad de la crisis edilicia», y denunció que «hay un peligro cierto, pero recién ahora, con esta desgracia, autoridades porteñas lo reconocen».
A la salida de la reunión los funcionarios Regazzoni y Gulmanelli no quisieron hacer declaraciones ya que, dijeron a Télam, hay «una investigación en curso».