14.07.2015. La UTE de docentes porteños dispuso un paro mañana. Piden la restitución de la directora y una maestra de la Escuela 8, uno de cuyos chicos murió por los golpes recibidos en su casa.
La Unión de Trabajadores de la Educación (UTE) ratificó que el próximo miércoles se realizará un paro de actividades en todos los niveles en las escuelas de la ciudad de Buenos Aires, para repudiar el desplazamiento del cargo de la directora y de una maestra de la Escuela 8 del Distrito Escolar 12 de Flores, donde iba el nene de cinco años que murió un mes atrás por una brutal golpiza de su padrastro. Además, se realizará un acto en la puerta de este establecimiento –donde ayer se realizó un abrazo–, y en el que padres y docentes reclamarán “mejores condiciones para el tratamiento de estos casos”.
“Desde la UTE convocamos a esta medida y hemos recibido el respaldo de otros sindicatos”, explicó Mariano De Negris, secretario de Comunicación de UTE. El cese de actividades es para “repudiar el apartamiento del cargo de la directora, Elsa, y una maestra, Alejandra, del Jardín de Infantes Número 2 del distrito 12”, amplió De Negris.
Con el desplazamiento, el gobierno porteño buscó responder a la muerte de Agustín Marrero, un niño que acudía a sala de cinco de este jardín y que falleció el 9 de junio tras recibir una feroz golpiza que, entre otras lesiones, le causó “desgarro hepático, hemoperitoneo, hemorragia perirrenal y hematoma subdural”, según señaló el informe forense.
Por el crimen se encuentra acusado el padrastro del nene, Leandro Sarli, y entre las pruebas está la declaración de la hermana del nene, de siete años, mediante el sistema de Cámara Gesell.
El vocero de UTE informó que durante el día de hoy se replicarán las actividades que se realizaron ayer en todas las escuelas como abrazos y charlas en las que la comunidad educativa se organizó para detallar los motivos de la medida y exigir al Gobierno de la Ciudad que “desarrolle políticas públicas que protejan a los niños, niñas y adolescentes”.
Tras una serie de rumores que habían comenzado la semana anterior, el viernes pasado tres funcionarios porteños llevaron a la escuela, ubicada en Avellaneda 2555, el acta en la que informaban que se apartaba del cargo a una maestra y a la directora del jardín para iniciar un sumario, porque según el ministerio estaban al tanto de que el chico era golpeado y no alertaron sobre la situación. Desde el ministerio, alegaron que no habían cumplido con el protocolo para estos casos. “En realidad, hay disposiciones y mecanismos establecidos para cada nivel educativo sobre cómo actuar con los casos de violencia, pero no existe un protocolo”, explicó a Página/12 Matías Segreti, padre de una de las estudiantes del colegio que respaldan a las docentes.
Según trascendió, las maestras habían detectado que el nene presentaba lesiones, pero confiaron en la palabra de la madre, quien dijo que el chico se lastimaba jugando. Tras el pedido explícito de las educadoras, la madre de Agustín llevó certificados médicos firmados por un pediatra para corroborar que los golpes del nene eran producto de accidentes domésticos.
“En el caso de nivel inicial el procedimiento es realizar una denuncia, pero para ello hay que corroborar la existencia de la situación de abuso”, alegó Segreti y expresó que “no puede responsabilizarse a dos trabajadoras por las fallas que tiene el sistema”.
“No puede apartarse a las docentes, es lógico que exista una investigación, pero no que se las desplace de la actividad como si fueran una amenaza para la comunidad”, amplió Segreti.
“Lo que dice el Gobierno de la Ciudad es que tiene que iniciar un sumario para investigar las actuaciones previas de la docente del aula y de la directora”, detalló De Negris. “Nosotros no estamos en contra de esta investigación, pero no hay motivos para separar del cargo a las docentes. Lo que vemos es que hay una revictimización de la comunidad educativa que ya vivió hace un mes una situación dolorosa y traumática y ahora se queda sin una docente y sin conducción”, agregó.
“Como padres queremos responder al jefe de Gobierno porteño que salió en un diario a decir que el paro de los sindicatos responde a una actitud oportunista y de campaña. Queremos decirle que la UTE levantó un reclamo de toda la comunidad educativa que está siendo golpeada nuevamente, porque no sólo perdió a un nene, sino que además ahora se queda sin maestras”, expresaron los padres de la Escuela 8 en un comunicado.
Georgina Giaccone, integrante del colectivo de padres y docentes, contó que “desde un primer momento tanto la directora como la docente llevaron todos los papeles a la Justicia, están dispuestas a colaborar con la causa, y es más, si nos llaman a declarar a los padres, vamos a ir”.
“No sólo queremos que se restituyan en sus cargos a Elsa y Alejandra –amplió Matías Segreti–. También es necesario que existan políticas públicas que funcionen y garanticen los derechos de los niños. Estos casos no pueden depender de un solo docente, deben recibir un tratamiento más profundo porque, si bien un maestro puede dar cuenta de que existe una situación de abuso, hay muchos chicos a los que estar atentos y muchas fallas en el sistema para ayudarlos”, concluyó.
Informe: María Fernanda Rezzano.