El Gobierno porteño decidió congelar las asignaciones familiares de los empleados de la ciudad manteniéndolas en $270 desde hace dos años. El último aumento fue en el 2012 cuando estaba en $230. Sin embargo, no utiliza los mismos criterios de ajuste para las tarifas del Subterráneo cuando la misma pasó de $1,10 en el 2012 a $4, 40 en el 2014. Esto significa que mientras la tarifa del subte aumentó un 309% en dos años la asignación por hijo/a solo aumento el 17 % en el mismo período.
La asignación por hijo/a en la ciudad de Buenos Aires es menos de la mitad de la AUH a nivel nacional, establecida, tras el último incremento, en $ 644. Esto representa una depreciación del salario de los/as trabajadores/as de la Ciudad que no solo pagan el transporte público un 309% más, además, no ven incrementado su salario con un derecho adquirido como la asignación familiar.
El Jefe de gobierno porteño está en campaña y se maneja con un doble discurso: por un lado pide el aumento del salario mínimo a nivel nacional y por el otro le devalúa el salario a los trabajadores de la Ciudad de Buenos Aires aumentando el boleto del subte más del 300% y congelándoles la asignación por hijo a menos de la mitad de lo que establece la Asignación Universal por Hijo a nivel nacional.