14.12.2012. Para conseguir los votos necesarios, el PRO tuvo que aceptar subir los recursos para algunas áreas sociales, elevar el impuesto a los Ingresos Brutos a grandes contribuyentes y a la compra de autos. Los docentes protestaron puertas afuera.
Por Werner Pertot
La Legislatura se disponía al cierre de esta edición a empezar a discutir (y aprobar) el Presupuesto 2013 para la Ciudad. Los macristas debieron modificar diversos items a pedido de la oposición para allanar el camino a la ley de leyes que solicitaba Mauricio Macri. Entre ellos, debieron dar mayor presupuesto a algunas áreas sociales y subir el piso del impuesto de Ingresos Brutos para grandes contribuyentes. Si el presupuesto se aprobaba como estaba redactado ayer, habrá mayores impuestos de Sellos para la compra de autos. No preveía partidas para el subte, cuya discusión se postergó porque el macrismo no consigue los votos necesarios.
Afuera de la Legislatura, el gremio UTE-Ctera hizo una marcha para reclamar por el presupuesto del PRO. “Una vez más el macrismo envió un presupuesto a la Legislatura que reduce el esfuerzo estatal en las áreas sociales: salud, educación, vivienda, transporte y cultura”, cuestionaron. La sesión empezó muy tarde, cerca de las 20.30 de la noche, y con un discurso duro del jefe del bloque del Frente para la Victoria, Juan Cabandié. Cuestionó que se hable de un “pacto PRO-K” por una serie de leyes inmobiliarias que los dos bloques votaron en conjunto. Cabandié sostuvo que es un “acuerdo coyuntural”. “Pacto es la foto del lunes: Macri, Binner, Barletta, Cobos, Humberto Tumini. Pacto es el que hizo Binner con el campo golpista”, lanzó. Cabandié defendió el plan Pro.Cre.Ar “para combatir la especulación inmobiliaria”. El legislador de Proyecto Sur, Julio Raffo, le contestó que la iniciativa de Isla Demarchi era “un curro audiovisual”, y cuestionó el barrio que proyecta IRSA sobre la ex Ciudad Deportiva de Boca. Los proyectos serían tratados en una sesión el jueves 20.
Por otra parte, Cabandié cuestionó “esa opereta barata de que yo golpeé” a una persona en una audiencia pública sobre la venta de terrenos de la Ciudad. “Lo empujé, no le pegué, lo empujé porque me insultaba. Me arrepiento de haberlo empujado. Pero a veces es difícil aguantarse ciertos dichos de mi condición de hijo de desaparecido y que soy igual que mi apropiador. Le pido perdón a esa persona de El Hormiguero”, indicó. Le siguió un largo debate sobre las audiencias públicas.
El Presupuesto 2013 se empezó a tratar bien pasadas las 22, hora en la que la legisladora Gabriela Cerruti pidió “llegar despiertos” al tratamiento de la ley. Los negociadores macristas señalaron a este diario que la negociación del presupuesto fue ardua y que debieron aceptar subir el piso de Ingresos Brutos para grandes contribuyentes, y contemplaron una ampliación de presupuesto en Vivienda y Atención Ciudadana. Con esto pensaban tener menos votos en contra cuando se votara la tarifaria, que prevé incrementos en Ingresos Brutos a grandes contribuyentes (de más de 40 millones en rubros como telefonía móvil o construcción) y en Sellos (del 1 por ciento a autos nuevos y 1,5 por ciento a los usados). “Esto es consecuencia de que Sellos del sector inmobiliario se desplomó y hay que compensarlo”, explicó el presidente de la Comisión de Presupuesto, Rogelio Frigerio. Habrá un nuevo aumento de ABL, que –según la gestión PRO– será de un promedio del 23 por ciento. El presupuesto llega a más de 40 mil millones de pesos y no incluía ninguna partida para el subte.
Los diversos bloques de la oposición coincidían en que el PRO tenía los votos necesarios para aprobar el Presupuesto, habida cuenta de que una buena parte se abstendría para no bloquear la ley. El bloque de Buenos Aires para Todos adelantó en un comunicado que no acompañaría ninguna de las iniciativas del PRO. “Mientras el PRO insista y siga profundizando un modelo regresivo, votaremos en contra”, aseguró Fabio Basteiro.