La Unión de Trabajadores de la Educación (UTE-CTERA) negó que la negociación con el jefe de gobierno porteño Horacio Rodríguez Larreta estuviera cerrada y aseguró que existe una operación mediática del presidente Mauricio Macri y del ministro de Educación, Esteban Bullrich, para instalar diferencias entre los docentes de Capital y la Provincia de Buenos Aires.

“El único objetivo es desviar el eje de la discusión y ocultar la responsabilidad del Gobierno nacional en la resolución del conflicto docente. Sabemos que detrás de la fragmentación del conflicto docente está el objetivo de volver a los ’90”, denunció la UTE.

Una opinión del columnista Carlos Pagni, publicada en la edición impresa del diario La Nación, daba por sentado que la UTE había llegado a un acuerdo con Larreta el viernes pasado, cosa que lo había convertido en “aliado” de María Eugenia Vidal, quien también propone un aumento del 18 por ciento para los docentes de la provincia de Buenos Aires, aunque en este caso en cuatro cuotas. Sin embargo, el secretario general de la UTE, Eduardo López, lo desmintió: “Mañana nos reunimos. Vamos a ratificar el pedido de un 35 por ciento de aumento y vamos a pedir que intercedan ante el Gobierno para que convoquen a una paritaria nacional”.

López señaló a Página/12 que se están publicando “falsedades” sobre un supuesto fin de la negociación con el Ministerio de Educación porteño, después de la propuesta del aumento del 18 por ciento en dos cuotas, más un ajuste por inflación, “cuando en realidad los dos sectores, el patronal y el de los empleados, reconocieron el rechazo del gremio al último ofrecimiento”.

“No hay diferencias con los gremios bonaerenses. Pertenecemos a la Confederación de Trabajadores de la Educación. Tenemos distintas tácticas pero una misma estrategia: no aceptar el 18 por ciento como techo, que se deje de provincializar el conflicto y que se llame a paritarias nacionales. Si no, volveremos a parar”, advirtió López.

El artículo de La Nación delineaba cuáles deberían ser los pasos a seguir por el Presidente y la gobernadora bonaerense para poner fin al conflicto docente «aunque sea con una paritaria de juguete», después de la movilización masiva del lunes en todo el país y la multitudinaria marcha de maestros al Ministerio de Educación en el primer día de huelga nacional docente.

«No vamos a ser cómplices de una operación mediática que busca blindar al Gobierno de Macri en la crisis que atraviesa, producto de gobernar para los ricos dándole la espalda a las necesidades de los trabajadores.  No vamos a aceptar la pérdida del poder adquisitivo en la Ciudad de Buenos Aires y en ninguna jurisdicción del país», respondió la UTE.