Quienes firmamos debajo, miembros de la comunidad educativa :
-
familias,
-
estudiantes,
-
asociaciones cooperadoras,
-
organizaciones sociales y sindicales,
-
académicos/as, investigadores/as,
nos pronunciamos a favor de la apertura de un debate participativo y representativo de todas y todos los que habitamos la Ciudad de Buenos Aires ante los anuncios de la modificación de los planes de estudio de los profesorados de educación primaria y de la escuela primaria.
Ante la expresión del Gobierno de la ciudad “La escuela primaria que queremos” expresamos:
Queremos una escuela que enseñe los contenidos socialmente significativos que ya fueron plasmados en los Núcleos de Aprendizaje Prioritarios (NAP aprobados en CFE), cualquier reducción unilateral de los contenidos es condenar a la escuela a enseñar por debajo de lo que la sociedad definió como prioridad
Queremos una escuela donde todos los campos de conocimientos tengan igual valor y asignación de recursos para su enseñanza.
Queremos una escuela que desarrolle capacidades complejas y que esas capacidades sean subsidiarias de los saberes y no al revés. La educación no puede ser simple adiestramiento.
Queremos una escuela que tenga tiempo para construir un proceso de apropiación de lo que se enseña. Para tener ese tiempo es necesario organizar la escuela por ciclos y garantizar la articulación los mismos. Esta escuela que queremos tiene que tener tiempos para los lenguajes artísticos, para los juegos y deportes, para visitas a museos y a espacios culturales.
Queremos una escuela que considere la perspectiva de la ESI, los derechos humanos, la interculturalidad y tantos otros aprendizajes que hoy no están disponibles por las restricciones de la gestión.
Queremos una escuela con espacios para organizar los grupos en talleres. Para ello es fundamental la estructura edilicia y organizar adecuadamente los horarios, ambos estructurantes de la vida escolar.
Queremos una escuela con aulas equipadas tecnológicamente, conectividad y mobiliario adecuado para desarrollar en ella procesos de enseñanza y de aprendizaje significativas.
Queremos una escuela primaria que articule con el nivel inicial y secundario a largo plazo. Que impulse proyectos, debates, y actividades compartidas.
Queremos una escuela inclusiva, que pueda atender las trayectorias escolares, con grupos menos numerosos, con auxiliares pedagógicos en/de la escuela, ayudantes de laboratorio, de idiomas, ciencias y de actividades deportivas.
Queremos una escuela primaria que acompañe, enseñe, construya comunidad, que se incorpore a las actividades del barrio, con visitas a las bibliotecas y que se apropie y valore la cultura de la ciudad.
El gobierno de la Ciudad, que desde hace 15 años reduce el presupuesto educativo, ¿quiere la misma escuela que nosotros?
