Télam – Cable de Noticias – 22/02/2017. Un grupo de familias porteñas protestaba desde la mañana en las puertas del ministerio de Educación de la Ciudad de Buenos Aires para exigir la asignación de vacantes para sus hijos, que están desde noviembre en lista de espera, a menos de dos semanas del inicio de las clases, en el marco de un pedido generalizado de organizaciones gremiales, padres y madres, y la Defensoría del Pueblo de la Ciudad. «Estamos trabajando los listados para ver cuántas vacantes hay; en poco más de 15 días se va a saber, porque hay gente que toma la vacante, otros no y además hay que reacomodar», precisaron a Télam fuentes de la cartera educativa porteña, que aseguraron que «al no tener todos los listados trabajados no tenemos un número final». Bajo la consigna «la vacante es un derecho» las familias se autoconvocaron hoy en la sede ministerial, en Paseo Colón 255 del barrio de Monserrat. «Venimos reclamando una respuesta porque desde noviembre pasado estamos en lista de espera sin ninguna seguridad de que nuestros hijos ingresen al sistema escolar», aseguró a Télam Susana López, mamá de un niño de un año que reclama la vacante para el Jardín de Infancia Mitre, en Dorrego al 2700, en el barrio de Palermo. López señaló que funcionarios de Educación «me explicaron que el hecho de que esté en lista de espera significa que no está asegurada la vacante, cuando el ingreso a la educación inicial que es desde los 45 días hasta los 5 años, es una obligación del Estado y en este sentido hubo varios fallos judiciales». Las familias autoconvocadas «vamos a permanecer en un acampe hasta hoy a las 8 de la noche a la espera de una respuesta, primero porque el acceso a la educación es un derecho y segundo por necesidad, porque mucha gente no puede pagar una escuela privada; y nos quedamos acá para visibilizar nuestra situación», dijo tras añadir que en su caso, su hijo está en el número 33 de una segunda lista de espera. Por su parte, fuentes de la Unión de Trabajadores de la Educación (UTE) aseguraron a Télam que reclaman «información oficial sobre las vacantes» y advirtieron que «nuevamente va a haber falta de vacantes porque no se construyeron las escuelas», al tiempo que recordaron que «en 2016 el ministerio de Educación reconoció que faltaron 11.000 vacantes». El gremio expresó en un comunicado que «a partir del informe dado a conocer por la Defensoría del Pueblo de la Ciudad sobre la falta de Jardines Maternales y de Infantes estatales en el distrito, reafirmamos nuestro reclamo de que el Poder Ejecutivo porteño cumpla con la Constitución de la Ciudad que en su Artículo 24 establece la universalidad del Nivel Inicial». Explicaron que si bien hasta los cuatro años la escolaridad no es obligatoria, el término «universalidad» alude a que no es obligación de las familias la concurrencia a establecimientos educativos, pero sí es obligación del Estado garantizar las vacantes en instituciones públicas de aquellos que deseen o necesiten acceder a Escuelas Infantiles o Jardines Maternales desde los 45 días de vida. La Defensoría del Pueblo de la Ciudad de Buenos Aires emitió a comienzos de año un informe en el que expresaron que recibieron «cerca de 200 reclamos por disconformidad con el resultado del proceso de tramitación de vacantes para el ciclo lectivo 2017». Esas objeciones «remiten a casos de no otorgamiento de vacantes en las escuelas elegidas por las familias o a su no confirmación en establecimientos educativos de nivel inicial. En el caso de las escuelas secundarias, los reclamos se originan en que la vacante asignada no respetó la especialidad o la orientación elegida por los estudiantes al momento de anotarse». En la página de Educación del Gobierno porteño se especifica que el nivel inicial es «para niños entre los 45 días de vida y los 5 años» y señala que está conformado por los jardines que dependen de la Dirección de Educación Inicial y aquellos que forman parte de la Dirección de Formación Docente. «Esta primera etapa en la trayectoria escolar, constituye un derecho fundamental, en tanto asegura los aprendizajes presentes y futuros, a través de propuestas educativas de calidad que ponen a los niños en contacto con los contenidos propios de su edad y promoviendo la formación de valores personales y sociales orientados a la convivencia y a la integración activa al ámbito escolar y comunitario», dice el texto oficial.