El lunes 9 de diciembre los trabajadores de la Escuela de Capacitación Docente – Centro de Pedagogías de Anticipación (CePA) eligieron a sus delegados por la Unión de Trabajadores de la Educación. Con una votación que alcanzó aproximadamente al 30 por ciento del padrón, las elecciones marcaron un récord histórico. Fueron electos como delegados Miguel Galante, Cecilia Guerra Lage y Cecilia Esperanza (titulares), Lorena Alfonso y Máximo Eseverri (suplentes).
Los resultados de la elección, que casi llegan a triplicar a los del año pasado, son fruto del trabajo que durante 2013 se llevó a cabo por los delegados, y que puso un freno a las condiciones abusivas, logrando la continuidad laboral de todos los compañeros que han manifestado su preocupación, resolviendo con éxito situaciones puntuales en el ámbito laboral, exigiendo canales claros de comunicación interna y fundamentalmente, abriendo el diálogo con las autoridades del Ministerio para la constitución de una Planta Orgánica Funcional (P.O.F.) de carácter consensuado e inclusivo. A su vez, la inclusión de un capacitador docente entre los delegados, reforzó la necesaria participación de los capacitadores que, a pesar de su extrema precariedad laboral (sus contratos son cuatrimestrales y la continuidad o baja son “a dedo”) incrementaron notablemente su concurrencia a votar.
La alta participación de los trabajadores en estas elecciones resulta aún más significativa teniendo en cuenta la vulnerabilidad a las presiones que éstos vienen sufriendo en los últimos años por parte de la coordinación general. La historia reciente del CePA está marcada por una política de premios y castigos, en la que los contratos por horas cátedra, de locación y los llamados “cargos índice” son administrados de manera discrecional, generando un clima de trabajo difícilmente hallable en otros espacios del Ministerio de Educación. Los resultados de esta elección demuestran que paulatinamente los trabajadores del CePA se están poniendo de pie en defensa de sus propios derechos, alcanzando un nivel de participación gremial sin precedentes en casi treinta años de historia, y de la mano del sindicato docente más fuerte de la ciudad.
La agenda de los delegados ya prevé una convocatoria a asamblea para los primeros días de marzo de 2014, centrada en consensuar líneas de acción que tiendan a la mejora de las condiciones laborales de los capacitadores y los trabajadores administrativo-pedagógicos; la organización de las medidas que apunten a garantizar la excelencia de la capacitación a través de mecanismos transparentes de selección y renovación de las propuestas; y la rearticulación del CePA con una política educativa democrática e inclusiva.
La Escuela de Capacitación Docente CePA está integrada por un plantel aproximado de 70 trabajadores que realizan tareas administrativo-pedagógicas y más de 400 capacitadores dedicados a la formación docente en y fuera de servicio. Con un presupuesto-base de sesenta mil horas cátedra anuales y casi 60 cargos índice, el CePA llegó a ser la Escuela de Capacitación Docente pública y gratuita más grande de América Latina, hoy en estado de emergencia por el desmantelamiento, el vaciamiento de cargos y la falta de comunicación con el sistema educativo.