20.12.2013. Un juez acusó a Daniel Catalano, de ATE Capital, de intentar robarle a un policía el palo con el que lo estaba agrediendo durante la represión en el Borda. Es un delito con pena de prisión. Ayer recibió el apoyo de un amplio abanico de referentes gremiales, políticos y sociales.
El dirigente Daniel Catalano recibió un importante apoyo desde diversos sectores.
Imagen: El dirigente Daniel Catalano recibió un importante apoyo desde diversos sectores.
Imagen: Télam.
Referentes gremiales, legisladores, asociaciones de profesionales y militantes sociales respaldaron a Daniel Catalano, dirigente de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) Capital, el único de los seis procesados al que además de resistencia a la autoridad y lesiones le imputan “robo en grado de tentativa” de la macana (el palo que usan los policías para pegar), tras la represión en el Borda por parte de la Policía Metropolitana, en abril pasado.
“En esta causa se expresa con claridad cómo el Poder Judicial corporativo es funcional al poder dominante y mediático. Es tan obvio y tan aberrante que se va a caer, pero tenemos que seguir denunciando y luchando”, sostuvo Humberto Rodríguez, secretario general adjunto de ATE Capital. El dirigente, que cerró de esta manera un encuentro en el que desde amplios sectores respaldaron a Catalano, advirtió que “hay que frenar la judicialización de la protesta social” y explicó que “si bien hay que exigir el desprocesamiento de todos, la gravedad del delito de intento de robo es que no es excarcelable”.
“Este procesamiento es muy complicado para los trabajadores porque entonces si estamos en una protesta y vienen a reprimir, lo único que podemos hacer es dejar que nos muelan a palos o nos maten, ya que de lo contrario nos procesan, entonces el mensaje es muy complejo”, comentó Catalano, tras la conferencia.
El 26 de abril de este año, una cuadrilla ingresó al Hospital Borda para tirar abajo el edificio donde funcionaba el Taller Protegido 19, un programa que se encuentra en diferentes espacios y que en el hospital daba cursos de carpintería y herrería.
Sobre este terreno, el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires planea construir un Centro Cívico y, por este motivo, estos cursos venían amenazados desde agosto de 2012. No obstante, los trabajadores habían logrado una medida cautelar que impedía que se destruyera el edificio. Para escoltar a quienes demolían el Taller 19 se hicieron presentes en el lugar efectivos de la Policía Metropolitana que no tardaron en comenzar a reprimir a trabajadores, pacientes, familiares, periodistas y legisladores.
El saldo: cuatro horas de una violenta represión que causó más de 40 heridos y ocho detenidos, de los cuales cinco fueron llamados a indagatoria y procesados por “atentado a la autoridad”, “resistencia a la autoridad” y “lesiones leves”.
En esta causa llevada adelante por el juez Jorge Adolfo López, a cargo del Juzgado Nacional de 1ª Instancia en lo Criminal de Instrucción Nº 30, se agregó además la indagatoria y procesamiento de Catalano, que no había sido detenido ese día, a quien se lo acusa también de “robo en grado de tentativa” por sacarle la macana (palo) a un policía que lo estaba agrediendo.
Este mismo juez determinó además el sobreseimiento de todos los funcionarios macristas, incluido el jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Mauricio Macri, y el ministro de Desarrollo Urbano, Daniel Chain, que es quien dio la orden de la demolición.
En cuanto a la Policía Metropolitana, sólo quedó imputado el comisionado Martín Roth, retirado de la Federal, por los delitos de abuso de autoridad y lesiones leves y graves.
“Al Tanito (por Catalano) lo atacan porque a la derecha le molesta, le duele el trabajador solidario, no lo aguanta. Esto intenta ser aleccionador. Pero tenemos que responder con más trabajadores solidarios, más organización y más derechos sociales en la salud”, sostuvo Eduardo López, secretario general de UTE-Ctera, uno de los oradores de la conferencia.
Marcelo “Nono” Frondizi, miembro de la Junta Interna de Talleres Protegidos y dirigente de CTA nacional, advirtió que “sabemos que ahora que están removiendo los escombros en el Borda quieren poner unas oficinas; no lo vamos a permitir, nosotros no vamos a parar hasta reconstruir el Taller Protegido 19 por el que pasaron tantas generaciones de pacientes y de trabajadores”.
Para Héctor “Pelusa” Carrica, dirigente de ATE, “en la represión del Borda ‘no hubo errores ni excesos, son los milicos del proceso’, ya que si uno observa los legajos del personal que conforma la Metropolitana, va a encontrar que tuvieron funciones durante la última dictadura”.
En la conferencia también estuvieron presentes los legisladores Pablo Ferreyra, Gabriela Alegre, el diputado Horacio Pietragalla, el dirigente Luis D’Elía y referentes de la Asociación de Profesionales del Borda y de la comisión interna del Borda, de H.I.J.O.S. Capital, la Túpac Amaru, el Movimiento Evita, la Pocho Lepratti, entre otras organizaciones.