Docentes rechazaron oferta paritaria y peligra el inicio de clases en la Ciudad

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Tiempo Argentino – Nota – Argentina – Pag. / 05.02.2016. Los sindicatos docentes porteños rechazaron la oferta del Gobierno porteño, quien propuso un incremento salarial del 22 por ciento, a pagarse en cuatro cuotas. «Sólo un milagro puede modificar esto y que las clases empiecen el 29», afirmó Gustavo Frutto, de la UDA. La ministra Acuña, en cambio, se mostró «confiada».

Las paritarias docentes son el primer desafío laboral de envergadura que en frenta el macrismo en su triplo rol de gestor en Nación, provincia de Buenos Aires y la Ciudad.
Luego de un primer tropiezo en las paritarias bonaerenses, ayer fue el turno del gobierno porteño, que encabeza Horacio Rodríguez Larreta.
La primera reunión de la paritaria docente de la Ciudad de Buenos Aires concluyó sin acuerdo entre los 17 gremios del sector y el Ministerio de Educación porteño, dado que los sindicatos rechazaron la oferta salarial del 22 por ciento, a pagarse en cuatro cuotas, y afirmaron que “de esta manera, sólo un milagro puede hacer que el 29 de febrero comiencen las clases” en la Capital.
“Sólo un milagro puede modificar esto y que las clases empiecen el 29 de febrero”, afirmó el secretario general de la Unión Docentes Argentinos (UDA) Gustavo Frutto en un conferencia de prensa al finalizar el encuentro en el edificio de la cartera educativa, ubicada en la avenida Paseo Colón 255 de esta capital.
No obstante, la ministra de Educación, María Soledad Acuña, manifestó su convencimiento de que el período escolar se iniciará en la fecha estipulada, al recordar que “hemos logrado que las clases siempre empiecen a término en los últimos 8 años, porque todos ponemos por delante la educación y lo que los chicos necesitan”.
La primera convocatoria de la paritaria docente de la Ciudad fue presidida por Acuña, en una reunión que se extendió por una hora y en la participaron representantes de los 17 gremios del sector, como el secretario general de la Unión de Trabajadores de la Educación (UTE) Eduardo López, su par de Ademys Jorge Adaro y Frutto de UDA, entre otros.
Pese a la falta de acuerdo, Acuña evaluó el encuentro como “positivo” al señalar que “más allá de los números que es lo que les preocupa a los representantes gremiales hablamos también de otras cuestiones importantes como las condiciones laborales”.
“Fue un buen encuentro, aunque obviamente hay que seguir trabajando, por eso tendremos una nueva reunión el próximo 16 de febrero para seguir conversando”, señaló.
Fundamentó la propuesta salarial en que la inflación va a ir bajando en la segunda mitad del año, como prevé el gobierno nacional, y explicó que el ofrecimiento llevará el sueldo en octubre, para un docente que ingresa sin antigüedad y de jornada completa, “por encima de los 20 mil pesos”.
Si bien admit ió que “hoy los números que tenemos son éstos”, Acuña dijo que “vamos a seguir hablando para ver cómo podemos acercarnos, ya que ellos piden un adelanto que empiece en enero y lo vamos a estudiar”.
“Hoy un docente por jornada simple como salario de inicio cobra arriba de los 8 mil pesos y nosotros estamos proponiendo llevarlo por arriba de los 10 mil pesos”, destacó Acuña.
Las negociaciones docentes son seguidas de cerca por el Gobierno central, ya que sirven de referencia para los gremios estatales, y suelen ser parámetro también para actividades no sindicalizadas, como las fuerzas de seguridad. Por esta razón, desde la Casa Rosada celebraron que la Ciudad se plegara a la estrategia PRO de iniciar la negociación por debajo del techo del 25%, fijado por el ministro nacional de trabajo Jorge Triaca.
Si bien luego el gobierno pretendió dementir que tuviera la intención de fijarle un tope a las negociaciones paritarias, los cierto es que Triaca no hizo más que poner en palabras lo que otros funcionarios habían intentado plantar con eufemismos, como el titular de Hacienda, Alfonso Prat Gay, quien fue el primero en sugerir que esperaba para este año una inflación que oscile en torno al 25%.
Esa estimación fue traducida luego por Triaca como el techo paritario al que aspiraba el Gobierno de Mauricio Macri. La fuerte reacción de los gremios obligó a una rectifiación oficial, verbalizada por el jefe de Gabinete Marcos Peña. Sin embargo, los sindicatos desde entonces se declararon en alerta. Y preparan el terreno para una negociación que, estiman, será dura, en el marco de una ola de despidos en el sector público que derramó hacia el sector privado.

Pese a la falta de acuerdo, Acuña evaluó el encuentro como «positivo» porque se discutieron «otras cosas además de los números».