19.02.2013. El ministro de Educación porteño, Esteban Bullrich, durante el encuentro paritario ayer con los gremios locales. Las conversaciones se reanudarán hoy a las 15.
Contra reloj para esquivar los paros la próxima semana, el Gobierno del porteño Mauricio Macri ofertó ayer a los docentes una suba del 22% (en tres tramos) que fue rechazada, mientras que el de Antonio Bonfatti (Santa Fe) les propuso un alza del 24% (en dos cuotas), que fue tildada de insuficiente aunque será evaluada. Pero el bonaerense Daniel Scioli ni siquiera los citó, frente a la reticencia nacional a destrabarle fondos para solventar un aumento, por lo cual los sindicatos definirán hoy si arrancarán las clases el lunes, con pronóstico negativo.
La postal -con sus matices- es representativa de las difíciles negociaciones que deben encarar los mandatarios a sólo tres días hábiles del retorno a las aulas, al no contar con una suba del salario mínimo consensuada a nivel nacional, tras el naufragio de la paritaria federal en el Palacio Pizzurno.
El pasado viernes, ante la falta de entendimiento con Uda, Ctera, Sadop, Amet y Cea, el ministro de Educación, Alberto Sileoni, decretó una suba del salario mínimo del 22% en tres tramos, que fue cuestionada tanto por los dirigentes nacionales como por los gremios del interior, a partir de pretensiones de recomposición de entre el 25% y el 30%.
En este delicado terreno, pese a la fuerte presión ejercida por el Frente Gremial y por Udocba, el Gobierno de Scioli tampoco convocó ayer a una reunión paritaria para discutir una recomposición salarial, que los sindicatos ficharon en el 30%.
La dilación se basa en que la Casa Rosada no destrabó aún la tradicional asistencia de fondos con la que auxilia a la provincia todos los años para sostener las subas a los maestros, a tono con la creciente tensión política entre ambas administraciones por el carácter presidenciable 2015 de Scioli y sus últimos contactos con dirigentes críticos del kirchnerismo.
En el entorno del mandatario admiten que sólo pueden solventar con fondos propios una suba del 6%, y que cerrarán un acuerdo paritario únicamente si hay un convenio firmado con Nación. «No vamos a hacer ofertas que no se puedan pagar», reconocieron.
Los gremios exigen un incremento del 30%, pero para el caso de que efectivamente se active un envío de recursos nacionales, ya el Ejecutivo advirtió que el techo «es el 22%».
Ante el agotamiento de los tiempos, ayer el Frente Gremial enfatizó que «a tres días hábiles del inicio de clases no está garantizado el inicio del ciclo lectivo» y que el comienzo de las clases «depende exclusivamente» de Scioli. Pero no lograron mover el amperímetro oficial, y hoy definirán si habrá medidas de fuerza en el comienzo del ciclo lectivo del próximo lunes, mientras que Udocba ya amenaza con una huelga de 72 horas.
Por de pronto, hoy a las 9 la conducción de la CTA bonaerense -con la presencia de Roberto Baradel (Suteba)- anunciará las medidas de acción que aplicará en caso de que el Gobierno intente reproducir la misma oferta salarial nacional.
Por su parte, ayer el ministro de Educación porteño, Esteban Bullrich, propuso a los docentes un aumento del 22% (como Nación), en tres tramos de 10% (marzo), 5% (julio) y 7% (octubre). Pero los dirigentes lo rechazaron y se abrió un cuarto intermedio hasta hoy a las 15, en un distrito cuyo salario mínimo hoy es de $ 3.120 y que tiene previsto retomar el ciclo lectivo el próximo miércoles.
«Estamos pidiendo 30% como mínimo para toda la escala salarial, en blanco, que no sea en cuotas y retroactivo a enero», dijo Néstor Di Miglio (Ademys), mientras que Eduardo López (UTE) remarcó que «un salario de 3.120 pesos en una ciudad como Buenos Aires es bajo».
En Santa Fe, en tanto, el gobierno del socialista Bonfatti ofertó ayer a los gremios locales una suba del 24%, en dos tramos (15% en marzo -para elevar el salario mínimo a $ 4.640- y 9% en julio -$ 4.987-). Si bien el porcentaje -ofrecido por los ministros de Educación y de Trabajo, Claudia Balagué y Julio Genesini– resultó superior al 22% decretado por Nación, fue inferior al 25% exigido por los sindicatos.
Pero los dirigentes receptaron la oferta, que será analizada desde hoy en asambleas de toda la Provincia. «Pedimos que se tomen en cuenta cuestiones planteadas por los 4 gremios para arribar a una oferta superadora», dijo Sonia Alesso (Amsafé).
Mientras tanto, intentan avanzar por estas horas las negociaciones en otros distritos. Por caso, las paritarias serán retomadas hoy en Jujuy y mañana (pese al feriado) en Misiones, mientras que en Neuquén los maestros ratificaron el paro en el regreso a las escuelas frente al aumento decretado por el mandatario Jorge Sapag (MPN).
En este marco, ayer Sileoni volvió a defender el aumento del 22% en tres cuotas, que eleva el salario mínimo de $ 2.800 a $ 3.248 (marzo a agosto); a $ 3.332 (de septiembre a noviembre) y a $ 3.416 (diciembre a febrero). «Un aumento del 30% es irreal y aún el 25% es imposible que lo paguen las provincias», enfatizó. Por su parte, los gremios nacionales comenzaron a desplegar asambleas para discutir si aplicarán medidas de fuerza, más allá de la catarata de amenazas que emana de los sindicatos locales de buena parte de las provincias.