Por: Belén Fernández
Ámbito Financiero / 31.08.2015. “En el nivel medio hay mucha falta de vacantes. Y es por eso que los alumnos de 13 años terminan yendo al secundario en el turno nocturno”. La denuncia la hace Rubén Berguier, secretario gremial de Unión de los Trabajadores de la Educación (UTE). Si bien no se trata de una novedad, es una problemática que viene creciendo a pasos agigantados en la zona sur de la Capital Federal, en donde la población aumentó un 10% en las últimas dos décadas.
En Lugano y Soldati los chicos que tienen suerte se acostumbraron a viajar para ir a la escuela en el turno de la mañana o la tarde. Pero aquellos que no deben transportarse, arrancan su jornada escolar recién a las seis de la tarde, para salir del establecimiento después de las 22. “Ante la falta de construcciones por parte del Ministerio de Educación, lo que hacen es convertir los primarios en secundarios, pero durante la noche”, explica Berguier.
Desde el Gobierno de la Ciudad desmienten la falta de construcciones y aseguran que “en 2007, la Legislatura sancionó la ley de emergencia en edificios educativos. Por lo que hasta hoy se construyeron 57 nuevos establecimientos, aunque siete de ellos aún no están finalizados”. Es decir, un promedio de siete escuelas por año. Para las familias de la zona sur no es suficiente.
Es que según el último censo realizado en 2010, la población ubicada en el corredor sur creció un 10 por ciento en comparación con 1991, teniendo en cuenta que se encuentran las zonas más vulnerables, ya que las villas que más crecieron en población son las del sur. Por lo que, según los datos oficiales, entre la 1-11-14 y la 21-24 suman 55.755 personas, de los cuales muchos son niños que necesitan escolarización.
“Sólo se construyeron 12 escuelas de nivel medio; nosotros hicimos un estudio según la cantidad de alumnos que hay y consideramos que por lo menos son necesarias 31 escuelas secundarias”, explicó Federico Puy, congresal de UTE. Es que de las 57 escuelas nuevas, 36 se encuentran en la zona, pero sólo siete son escuelas medias. Además denuncian que “de Rivadavia hacia el norte son doble escolaridad, mientras que hacia el sur casi no hay doble turno”.
Desde UTE sostienen que la Escuela Media N°4 en Lugano, la N° 5 en Villa Riachuelo y la N° 1 en Piedra Buena funcionan durante el día como primarios y a la noche, como secundarios. Lo mismo sucede en la N° 6 del Bajo Flores. “No van sólo los chicos que trabajan, sino adolescentes que no consiguieron otra vacante en el barrio; es muy inseguro”, explicó Berguier. Desde el Ministerio de Educación desmienten esa versión y aseguran que sólo van jóvenes que necesitan ese horario. Aunque reconocen el problema. “Para la escuela 5 y la escuela 1, el Gobierno de la Ciudad está construyendo edificios propios que se inaugurarán en el próximo ciclo lectivo”, dijo una fuente del ministerio.
Desde la cartera educativa disponen de micros escolares para aquellos chicos que no tienen vacantes en las escuelas cercanas a sus hogares y deben trasladarse para estudiar. “Los chicos viajan por lo menos una hora, lo que hace es aumentar la tasa de ausentismo y deserción”, agregó Puy. La solución es paliativa y tanto familias como alumnos exigen más escuelas en la zona.