19.02.2014. En el colegio de Juncal al 3200 fueron descargados módulos de dimensiones reducidas. Padres y docentes denuncian que son para aulas. Un funcionario irá hoy a dar explicaciones. Protesta en el Normal 9. Aún no llegaron a las escuelas los listados definitivos de inscriptos.
Las aulas de “construcción rápida” que el Gobierno de la Ciudad se propone implementar para remediar la falta de vacantes en las escuelas continúan despertando resistencias entre padres, docentes, alumnos y legisladores porteños. En la Escuela Superior en Lenguas Vivas, en cuyo patio desde el lunes se encuentran containers con puerta y ventana de unos 2,5 por 6 metros, las protestas por la instalación de esas aulas y las inquietudes por el lugar en el que podrían ser montadas terminaron motivando que el jefe de Gabinete del ministro de Educación se comprometiera a tener una reunión con esa comunidad educativa esta mañana. Ayer, desde el Ministerio de Educación porteño aseguraron a este diario que las aulas modulares no son las que permanecen en el Lengüitas desde el lunes, sino que tienen una superficie aproximada de 42 metros cuadrados y que se construyen a partir del ensamble de los módulos pequeños. A las protestas por las futuras nuevas aulas de construcción rápida se sumó la de las autoridades del Normal 9 por las aulas modulares que existen allí desde hace cuatro años. Con esas instalaciones, explicó la vicedirectora del establecimiento, Laura Pazos, “nos dejaron sin patios ni halls, y hasta el momento no terminaron una de las aulas que estaban refaccionando y además ocuparon otra y nos quedamos sin aulas para primaria”. Por otro lado, hasta ayer no habían llegado a las escuelas de la Ciudad los listados definitivos de inscriptos.
La noticia de que el lunes habían llegado pequeños containers con puerta y ventana al patio del Lengüitas, en Juncal al 3200, corrió entre docentes, alumnos y familias, que ayer por la mañana protestaron en la puerta del establecimiento. “Trajeron dos aulas container, lo que generó descontento entre los padres y alumnos”, dijo Gonzalo Carrera, del centro de estudiantes, quien explicó que por ello se movilizaron “alrededor de 70 personas y le pedimos a la vicerrectora que nos diera explicaciones sobre las aulas; quedamos en que mañana viene al colegio el jefe de Gabinete de Esteban Bullrich. Una docente del establecimiento dijo a este diario que la semana pasada unos obreros estaban trabajando con cemento sobre el piso del patio. “Pensé que iban a construir aulas, pero después vi los containers, y ahora no sabemos de qué se trata, porque son aulas realmente muy pequeñas. El lugar donde quedarían definitivamente no se sabe, no lo comentan. Deberían hacer tres salas más de inicial, porque hay inscriptos de más, eso lo reconocieron ya”, señaló. De acuerdo con la docente, que prefirió mantener en reserva su nombre, la instalación de esas aulas precarias también genera debates entre los padres de los alumnos, porque “algunos no quieren que lleven las salas de 5 años a los containers; otros pretenden que a los containers vayan los inscriptos nuevos; otros no están de acuerdo con estos containers, pero dicen que tampoco se pueden dejar chicos sin vacantes. Es una situación embarazosa que se podría haber evitado si hubieran hecho las aulas durante el verano, que hubo tiempo”. Por las protestas, esta mañana, a las 9, el jefe de Gabinete del ministro de Educación, Esteban Bullrich, Diego Fernández, se reunirá con la comunidad educativa en el mismo colegio.
Desde el Gobierno de la Ciudad aseguraron a este diario que las aulas modulares no son los containers pequeños que pueden verse aún en el Lengüitas, sino las que mostró el subsecretario de Educación, Carlos Regazzoni, el lunes en el Polo Educativo Casa Amarilla. Las fuentes dijeron que, una vez emplazados los fragmentos, el resultado es un aula modular de unos 6 metros por 7, y aseguraron que todas estarán listas para el día de comienzo de clases, es decir, en dos semanas.
Por su parte, autoridades, docentes, alumnos y padres del Normal 9, de Callao al 400, protestaron por las obras inconclusas y la presencia de containers como aulas desde hace tres años. El lugar se encuentra en obra desde hace ocho años, señalaron. “Por ese motivo hace unos cuatro años construyeron dos aulas modulares, llamadas containers, y nos dejaron sin patios ni halls, y hasta el momento no terminaron una de las aulas que estaban refaccionando y además ocuparon otra y nos quedamos sin aulas para primaria”, dijo la vicedirectora, quien agregó que el lugar tampoco cuenta ya con espacio para clases de educación física ni patios de recreación. “No tenemos patio de recreo, ya que fue ocupado por las aulas de chapa y cartón”, decía un cartel sostenido por una docente durante la protesta que se realizó por la mañana. En la recorrida del establecimiento también participaron la legisladora porteña Virginia González Gass y su par José Campagnoli.
Tras la recorrida, el titular de la Unión de Trabajadores por la Educación (UTE), Eduardo López, aseguró que “con esta actividad de visibilización de lo que sucede en el Normal 9 estamos demostrando que la intención de las aulas container es quedarse para siempre”. López, además, reiteró que la administración porteña podría “disponer de edificios vacíos para escuelas, ya que hay más de 10 mil en la ciudad de Buenos Aires, por lo que vamos a presentar en la Legislatura un listado que surge del relevamiento que estamos haciendo”.
En el aspecto judicial, mientras aún está vigente el plazo de tres días que el juez Osvaldo Otheguy dispuso para que el gobierno porteño resuelva las fallas de la inscripción y asigne vacantes a todos los alumnos de la Ciudad que la pidieron, la Defensoría General pidió “una aclaratoria” sobre la intimación que acompañaba ese plazo, para que la multa no fuera aplicada al Estado porteño sino a los funcionarios responsables del sistema de inscripción. La acción de amparo, promovida por el defensor Mario Kestelboim en diciembre, mencionaba explícitamente a la primera línea de funcionarios porteños como responsables, entre ellos al ministro Bullrich.