Maximiliano Kosteki y Darío Santillán, fueron asesinados a manos del comisario Alfredo Franchiotti y del oficial Carlos Quevedo, en una brutal represión policial el 26 de junio de 2002.
Ambos eran militantes de la Coordinadora Aníbal Verón, en una jornada de protesta en reclamo de planes sociales cortaban el Puente Pueyrredón. Reclamaban contra el hambre y la miseria del pueblo.
A 19 años de la Masacre de Avellaneda desde la Unión de Trabajadorxs de la Educación decimos ¡Darío y Maxi Presentes!