10.03.2015. Según informó la Unión de Trabajadores de la Educación (UTE) los distritos más afectados son el 21, 20, 19, 13, 11, 4, y 5, ubicados en los barrios de la zona sur. Ayer hubo volanteadas en Alagon y Pagola. Hoy habrá corte en Larrazabal y Alberdi a las 12 y a las 11:30 en Montes de Oca 439.
“El problema de base sigue siendo el mismo: el sistema de inscripción online. Otra vez tenemos 5.000 chicos sin vacante en la Ciudad y lo peor es que se perdió para siempre la capacidad de elegir que tenían las familias, porque ahora no son ellas las que eligen escuela para sus hijos, sino máquinas”, afirmó a Télam Eduardo López, secretario general de a Unión de Trabajadores de la Educación (UTE).
El dirigente precisó que los distritos más afectados son el 21, 20, 19, 13, 11, 4, y 5, y remarcó que “el sistema online desalienta la inscripción”.
“Los padres que eligen escuelas privadas pueden decidir dónde mandar a sus hijos, pero eso no pasa con los padres que eligen escuelas públicas”, sostuvo López.
“La madre del problema es que se sigue achicando el presupuesto educativo: hace 10 años se invertía el 30 por ciento (del presupuesto general) en educación en la Ciudad y hoy es el 20, lo que representa un 33 por ciento menos”, precisó, y enfatizó que “no sobran chicos, faltan escuelas”.
UTE anunció que junto a muchos padres realizarán cortes y manifestaciones que comenzarán mañana a las 11.30 en Montes de Oca 439, en el barrio de Barracas; seguirán a las 12 en Larrazábal y Alberdi, en Mataderos; y continuarán con una movilización a la Legislatura porteña el próximo martes a las 15.30.
“La ciudad Autónoma de Buenos Aires, uno de los distritos más ricos, carece de vacantes para sus pequeños. Miles de niños no tuvieron su primer día de clases y aún no saben ni dónde ni cuándo comenzarán. Ellos y sus familias vieron cómo el Gobierno porteño les impedía ejercer un derecho inalienable como el derecho a la educación”, denunció UTE en un comunicado.
“El macrismo somete a un injusto padecimiento a cientos de familias que merecen una educación de calidad para su hijos. La construcción de escuelas por parte del Gobierno Nacional es una realidad que posibilita el incremento de matrícula en más de un millón de nuevos alumnos, niños que ven concretado su derecho a la educación con más y mejor calidad, mientras en la Ciudad se transita un camino inverso”, agregó.
Una de las madres perjudicadas por la falta de vacante para su hijo, Yanina Barrera, esperaba esta tarde desde hacía horas en la cola del Liceo 8 de Mataderos para conseguir un lugar para el chico que debería haber comenzado esta semana primer año del secundario.
“Había al menos 190 personas en la cola, a cada uno nos daban un número y esperamos hace horas para conseguir un lugar para nuestros hijos. El mío ya tiene la vacante porque repitió primer año, pero me lo quieren dejar afuera y ya estamos perdiendo días de clases”, dijo en diálogo con Télam.
La mujer recordó que el año pasado tuvo el mismo problema: “Estuve casi un mes dando vueltas para conseguir escuela porque me mandaban a una que quedaba lejísimos de mi domicilio”.
“Estamos cansados de que no nos den respuestas, nos estamos organizando con un grupo de mamás para hacer una denuncia a la Defensoría del Adolescente planteando que no puede ser que haya empezado el ciclo lectivo y haya cientos de chicos sin vacante”, sostuvo.
Barrera indicó que si no reciben a su hijo en esa escuela “tendría que volver a inscribirlo online, y la página del Gobierno de la Ciudad está cerrada, intenté meterme y dice ‘página no encontrada’”.
En una situación similar Andra Maya -a quien tras días de incertidumbre le confirmaron hoy la vacante para su hijo- afirmó en comunicación con Télam que el año pasado al chico le tocó una escuela en un barrio lejano al de su casa.
“El año pasado mandaban a mi hijo a una escuela de Belgrano cuando yo vivo en Liniers; como el hermano estudiaba ahí, pude conseguir un lugar donde quería, pero esto es cosa de todos los años”, afirmó.
La mujer contó que hay largas colas de cientos de personas esperando para inscribir a sus hijos, “y entre ellos hay embarazadas, personas mayores, niños, y nadie hace nada, es increíble el destrato que tienen con la gente”.
“Esto es cuestión de suerte, yo pude resolver pero veo que la gente se va resignada porque no sabe dónde van a mandar a nuestros hijos ni qué va a pasar”, dijo preocupada.